Seguro que el tema os suena. Una pareja que pasa por un bache durante bastante tiempo y uno de los dos (o ambos) decide que darse un tiempo entre los dos podría ser una solución a sus problemas. ¿Puede funcionar darse un tiempo en pareja o no sirve para nada? ¿Cuáles son los mejores consejos para este proceso sirva para algo? Hoy os hablaré de este tema que me habéis pedido tanto por redes sociales: Consejos sobre darse un tiempo en pareja.

 

Las relaciones no son estáticas, sino que van evolucionando al igual que las personas que la integran. Lo ideal sería que los buenos momentos fuera lo más habitual, y que las discusiones y malos momentos fueran los esporádicos. Pero a veces ocurre al revés, y lo malo se vuelve costumbre. En este punto habría que pensar seriamente si se puede solucionar la relación o es mejor tomar caminos diferentes.

 

¿Para que sirve darse un tiempo?

 

 

Darse un tiempo es un intento de salvar la relación, en teoría. Y luego os explico por que digo lo de “en teoría”. Cuando llevamos demasiado tiempo sufriendo en pareja, estar juntos ya no es gratificante, las discusiones y peleas están a la orden del día y ya no sentimos esa conexión que teníamos antes, un tiempo puede ser un respiro necesario para los dos.

Consiste en parar, en lugar de estar metido en la misma rueda sin salida, haciendo siempre lo mismo o repitiendo patrones que lo empeoran todo. Una toma de distancia entre ambos permite ver las cosas con más perspectiva, tomar contacto con nosotros mismos, saber que es lo que queremos en una relación, a que cosas no estamos dispuestos a negociar y los que sí. Nos permite ver si hay solución a nuestros problemas de pareja o si es mejor tirar la toalla. Luego os cuento si funciona o no darse un tiempo en pareja.

 

 

¿Por qué digo más arriba que es un intento de salvar la relación en teoría?

 

 

Pues porque mucha gente se salvaguarda en el concepto de “es mejor que nos demos un tiempo” cuando tiene claro que no quieren continuar con la relación. Creen que es lo mejor para amortiguar el golpe a la otra persona (y también para no enfrentarse a su reacción, seamos sinceros), con la creencia de que así durante ese tiempo se acostumbrará a estar sin el/ella y así no será tan duro.

 

Pues siento decir que es todo lo contrario. Al hacer esto cuando no se tiene la intención de arreglar nada, la otra persona sufre muchísimo más. Es alargar la agonía, es hacerle creer a la otra persona que aún hay alguna solución, que hay un posible futuro. Esto genera ilusiones, incertidumbre, esperanza, sufrimiento y frustración. Lo mejor para no acrecentar el dolor es ser sincero con uno mismo y con tu pareja, y decirle que ya no quieres continuar. ¿Será duro? Por supuesto, será duro para ambos aunque seas tú quien tome la decisión, pero créeme que es el camino menos doloroso y menos egoísta.

 

Si estás en la otra posición y es tu pareja la que te pide tiempo y tú quieres continuar, esta situación puede ser devastadora. Es un gran desgaste emocional, con unos niveles de ansiedad muy altos, que llegan a dañar seriamente nuestra salud emocional. En estos casos para no alargar nuestro sufrimiento es aconsejable tomar este tiempo como una ruptura. Si al final la otra persona decide poner de su parte y continuar la relación, ya se verá pero estar a la espera agonizante de que el otro se decida es morirse lentamente.

 

 

¿Cómo debe hacerse el proceso de darse un tiempo?

 

 

Pues lo ideal es que no sea ni poco tiempo ni tampoco mucho. Es decir, no puede ser de uno o dos días, ni tampoco ser indefinido en el tiempo.

 

Lo ideal es que ambos estén de acuerdo en darse un tiempo y haya disposición por ambas partes. Si te está pasando que tu pareja te ha pedido tiempo y tú no quieres por que no lo necesitas o no lo ves necesario no tienes por qué aceptarlo. Pero si tu pareja ha llegado hasta ese punto es porque no está bien en la relación y por lo menos deberíais hablar y escucharos. Hay que saber que es lo que ocurre en tu relación y si es salvable o no. Si no la opción es romper.

 

El hecho de creer que no pasa nada malo, no significa que no lo haya.

 

También hay que llegar a unos acuerdos mutuos que ambos deben cumplir. Es decir, hay que decidir entre los dos cuanto tiempo durará, donde vivirán (sobre todo para parejas que viven juntas) y si se puede o no estar con terceras personas. Si es verdaderamente un tiempo para reflexionar y pensar en cómo mejorar la relación, el dejar entrar a otras personas hace realmente imposible que el tiempo sirva para su función. Obviamente siempre habrá un riesgo de que aparezca otra persona en la vida de uno de los dos, pero no es aconsejable pasar el límite ya que la confusión será mucho mayor.

 

Se recomienda comunicarse solo lo imprescindible. Mucha gente en esta situación por miedo a que el otro se olvide de ellos, comienza a bombardear a mensajes y llamadas al otro. Esto justo genera el efecto no deseado, no dejando que el tiempo sea efectivo y agobiando al otro. 

darse un tiempo

¿Funciona o no darse un tiempo en pareja?

 

 

El darse un tiempo es para que cada miembro de la pareja reflexione sobre sus propios comportamientos que están afectando negativamente en la relación, hacer consciente el porqué elegimos a esa persona al principio y porque continuamos con ella. Si le echamos de menos o no. Si es la persona con la que nos vemos en el futuro, si queremos que siga formando parte de nuestra vida o si por el contrario nuestro tiempo se ha acabado. Reconectar con nosotros mismos para tomar decisiones conscientes y no siguiendo emociones,  miedos, necesidades o creencias inconscientes. Saber cuáles son nuestras prioridades en nuestra vida y si nuestra pareja puede acompañarnos o no. Después del tiempo acordado, ambos tendrán que exponer sus propias conclusiones y reflexiones al otro y ambos deberán decidir que hacer.

 

Entonces, ¿funciona darse un tiempo? Pues NO sirve como forma de solucionar los problemas de pareja. Las probabilidades de que una relación funcione después de darse un tiempo son MUY bajas. Los problemas no se van mirando hacia otro lado ni pensando en ellos. Si después de un tiempo llegamos a la conclusión de que queremos apostar por nuestra relación, hay que remangarse y buscar solución a los problemas. Y si no podéis solos (si habéis llegado hasta este punto lo más seguro es que no sepáis) pedid ayuda. Un profesional es la persona indicada para guiaros lo mejor posible, y ayudaros a ver cosas que de otra forma no veríais. De otra forma aunque decidiéramos seguir en nuestra relación los mismos problemas estarían esperándonos y no tardarían en volver de nuevo.

 

¿Necesitas ayuda personalizada? Nosotras podemos ayudarte. En este enlace podéis encontrar información de nuestras sesiones online a todo el mundo.

 

 

¿Quieres mi EBOOK GRATUITO sobre "CÓMO PASÉ DE LA DEPENDENCIA EMOCIONAL AL AMOR SANO"? ¡Solo tienes que suscribirte y tendrás acceso automático!

¡Te has suscrito correctamente!