Hay gente que es magia. Esas personas que te encuentras en tu vida que iluminan por donde pasan, que con su sonrisa y su manera de ver la vida dan luz aún en la más oscura de las situaciones. Con una sonrisa perenne a prueba de bombas, buscan la parte buena donde parece no haberla. Desprenden buena energía y da alegría solo verlas. ¡Su alegría es contagiosa!
Personas que les dan la vuelta a la tortilla. Qué cuando parece que todo va mal, se sacan de la manga algo positivo y aún en la peor de sus tormentas tienen tiempo para sacar una sonrisa a los demás. Son fantasía y magia, saben que la vida es eso, cosas buenas y malas. Disfrutan de las primeras y relativizan las segundas. No buscan problemas, buscan soluciones.
Son flexibles, aprovechan las oportunidades y vencen obstáculos.
Si alguna vez te encuentras en tu vida a una persona mágica no la dejes escapar. Despertará tu vida de la monotonía, pondrá patas arriba lo previsible, hará que te rías de tus peores desgracias y pondrá luz y fantasía donde solo ves tinieblas. ¡Si has sigo el afortunado/a de encontrar una de estas personas estás de enhorabuena¡
Personas Grises
Y en el contrapunto están las personas grises. Son personas oscuras y tristes, que son como agujeros negros que absorben la luz por donde pasan. Les gusta rodearse de desgracias, de chismes, de cosas negativas. No quieren que las salven solo quieren engullirte en su oscuridad, convertirte en uno de ellos y apagar tu luz interior.
No les gustan las personas felices porque no las entienden. ¡Como en un mundo tan lúgubre (que se han construido ellos mismos a semejanza) puede haber alguien que sonría por que sí¡ Las consideran simplistas, incluso estúpidas, por no ver la negrura de la gente, las desgracias e injusticias que hay.
No consiguen ver lo bonito de este mundo: la magia, la fantasía, el color, el sol que sale después de la tormenta… no hay luz sin oscuridad, no hay tormenta que dure eternamente ni error sin aprendizaje. Pero eso no lo ven. No quieren ver la chispa de luz porque les da esperanzas y ellos la han perdido. Han sufrido tanto que se han puesto mil capas de armadura donde no entra el sol. Y cuanta más ancha es la armadura más débil es quien hay dentro.
Si te encuentras a una persona gris en tu vida escapa, huye. No intentes salvarla porque será inútil, no se puede ayudar a alguien que no quiere ser ayudado. Lo único que puedes hacer es escuchar sus quejas constantes. No le des soluciones porque te dirán miles de escusas. No quieras ver el lado bueno de las cosas, te dirán que no lo hay.
Sólo queda la esperanza de que un día esas personas grises quieran ser magia. Quieran dejar atrás la negrura para ver la luz, y dejar que el miedo, la esperanza, el amor, la tristeza… les toque la piel sin dejársela en el intento, vivir la vida con sus luces y sombras, y aceptar que las cosas pasan por algún motivo aunque todavía no puedas verlo.
¿Se nace siendo mágico o gris?
Desde que nacemos todos somos mágicos. Los niños son magia, fantasía, ilusión. Pero según nos vamos enfrentando a la vida, el no tener los recursos necesarios, hace que esa luz se vaya apagando. Desilusiones, injusticias, pérdidas importantes… Van haciendo que esa luz interior se vaya apagando sin nada que les motive para seguir alimentándola.
Las personas grises en algún momento perdieron la luz. Se han rendido. No quieren jugar en un mundo injusto donde se sienten los perdedores. Se centran en lo negativo, lo engrandecen y pasando por alto las cosas positivas. Lo que no saben es que solo en sus manos está el volver a brillar. Todos nacemos con magia. ¡De ti depende volver a alimentar tu luz¡
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Por que recuerda… todos nacemos con luz, con esperanza y amor. Que los palos de la vida no te conviertan en algo que no eres.